Este año, la colección Diver 300M de Omega, lanzada por primera vez en el año 1993, abraza la oscuridad total con un nuevo modelo de cerámica negra con tonos contrastantes de este mismo color. El objetivo es crear una verdadera sensación de profundidad y representar los rincones más oscuros del océano.
Aún así, este reloj de buceo conserva su legibilidad total, gracias al diseño de su esfera y la introducción de SuperLumiNova antracita. Este material luminiscente se puede ver en la escala de buceo, los índices PVD negros, las agujas esqueletizadas, y el punto a las 12 horas.
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Otra nueva característica de este Seamaster es la ablación con láser -que resulta en un relieve positivo- en casi todos los detalles de la esfera de cerámica (ZrO2): el patrón de olas, los minutos, la escala del bisel e incluso el logo de Omega.
La caja de cerámica pulida y cepillada, de 43.5 milímetros de diámetro y hermética hasta 300 metros de profundidad, integra corona y válvula de escape de helio en el mismo material. Su fondo con cristal de zafiro incorpora el sistema NAIAD LOCK patentado, el cual mantiene en posición todos los elementos gráficos del reverso.
Este último, a su vez, permite observar el calibre Co-Axial Master Chronometer 8806, de carga automática y reserva de marcha de 55 horas. Está certificado por el Instituto Federal Suizo de Metrología (METAS) y ofrece una resistencia al magnetismo de hasta 15,000 Gauss. Además, cuenta con cinco años de garantía.
