Por más de 190 años, Longines ha creado grandes leyendas en lo que a relojes-instrumento para pilotos se refiere. Este año, la firma del reloj alado toma como referencia un clásico nacido en 1935, sumamente apreciado por aficionados y expertos de la aviación.
Con sumo respeto a los códigos emblemáticos, pero sin dejar de lado las prestaciones técnicas del presente siglo, el nuevo Pilot Majetek presume una caja de acero en forma de cojinete y un bisel bidireccional acanalado que reafirma dicha fusión de lo clásico y contemporáneo.
Sus dimensiones y ergonomía se han renovado para ofrecer un modelo cómodo de llevar. Así, se presenta en 43 milímetros de diámetro, con formas ligeramente arqueadas y cantos más redondeados. En esta caja, a la hora 9, se incluye una placa conmemorativa que reza “1935” en referencia al año de nacimiento del modelo original.
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Por su parte, el bisel giratorio garantiza una estanqueidad de 100 metros y está acoplado con un triángulo móvil fluorescente de referencia o “starting time indicator”. Este es independiente y se halla por debajo del cristal de zafiro, a diferencia del modelo original donde cristal y bisel giraban como un bloque único.
Al estilo de los relojes de aviación, el Pilot Majetek de Longines presume una esfera negra mate con números árabes blancos, cubiertos con material luminiscente para un mejora en la legibilidad. Además, cuenta con un segundero a la hora 6 que se ha rebajado en la esfera y tiene un tamaño extra grande.
En su dimensión mecánica, el modelo está acoplado con el calibre Longines L893.6 con espiral de silicio y reserva de marcha de 72 horas. Asimismo, cuenta con la certificación de cronómetro por parte del Control Oficial Suizo de Cronómetros (COSC).