Con la colección Classics, Frédérique Constant consolidó hace varios años su misión fundacional: hacer que la relojería de lujo sea accesible al mator número de personas posibles. Hoy, convertida en un ícono de la manufactura y un referente de elegancia atemporal en la industria, esta familia de relojes se renueva con un diseño mucho más contemporáneo y energético.
A pesar de estos cambios, las nuevas referencias hacen gala de los códigos estéticos emblemáticos: números romanos, líneas refinadas y esferas con motivo guilloché que muestran las complicaciones más buscadas: fecha, día de la semana, mes, cronógrafo, fase lunar y semanario.
Todo ello se resume con la actualización de tres modelos, el Classic Index Automatic, Classic Quartz GMT y Classic Quartz, disponibles en 11 diferentes versiones.
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Para el primer modelo se ofrecen cinco nuevas referencias, con diferentes opciones de esfera y caja de 4o milímetros de diámetro en acero u oro rosa con agujas de acero azulado. Todas ellas incorporan un calibre automático de manufactura Frédérique Constant y 38 horas de reserva de marcha.
En el Classic Quartz GMT, por su parte, tres nuevos modelos se visten de acero e incorporan la función de doble huso horario o GMT. Impulsados por un movimiento de cuarzo, los relojes se ofrecen con esferas de color gris, negro y azul, con acabados de rayos de sol y ventana de fecha a las 3 horas.
Finalmente, tres nuevas referencias del Classics Quartz se presentan también en una caja de acero de 40 milímetros de diámetro, con esfera plateada, azul o negra.
