El Salon International de la Haute Horlogerie 2017 se convirtió en escenario de presentación para la radiante pieza Les Cabinotiers Celestia Astronomical Grand Complication 3600 de Vacheron Constantin. El término “Cabinotier” hace referencia a los artesanos que, en los siglos XVIII y XIX, trabajaban en pequeños talleres en la parte superior de sus casas, donde se podía aprovechar mejor la luz natural. Los cabinotiers, por tanto, son maestros relojeros, pero también abarcan profesiones como la de joyero, grabador o cantero. Desde el siglo XVIII, Vacheron Constantin resguarda y promueve el arte de los cabinotiers, por lo que fundó un departamento para conservar a los últimos guillocheurs, esmaltadores, grabadores y joyeros que manejan estas técnicas.
En esta ocasión, los maestros cabinotiers nos deleitan con la nueva pieza que rinde homenaje a su labor, un modelo celeste único de oro blanco con dos esferas y con 23 complicaciones en ellas. Este reloj astronómico nos indica la hora civil, la solar y la sideral, cada una con un tren de ruedas distinto más un tren de engranajes para las funciones solares. Dos agujas Breguet de oro blanco miden en la esfera el tiempo civil, que es el tiempo convencional de 24 horas de un día, y el tiempo solar, el cual se basa, en cambio, en la trayectoria del Sol en el curso de un día y se mide por el ángulo horario en un lugar y una hora concreta. La hora sideral se indica en el fondo del reloj y consiste en la escala de tiempo astronómico basada en la velocidad de rotación de la Tierra respecto al movimiento aparente de las estrellas “fijas”.
Quince de las 23 complicaciones de este reloj se han dispuesto ingeniosamente en la esfera principal color pizarra, entre las que se encuentran la ecuación del tiempo, un calendario perpetuo con fase lunar de precisión y un mareómetro, que consta de un indicador del nivel de la marea y una representación tridimensional de la alineación de la Tierra, la Luna y el Sol.
La segunda esfera, situada en la parte posterior, con sus dos discos de zafiro superpuestos, presenta las complicaciones del mapa celeste, donde aparece la constelación vista en el hemisferio norte, en un aro de antracita donde figuran los meses del año y un indicador de la reserva de marcha. Las dos elipses –una roja y otra blanca– corresponden, respectivamente, a las proyecciones de la elíptica y el ecuador celeste. Bajo la constelación, se encuentra el segundo disco con escala graduada que indica la hora sidérea y los cuatro puntos cardinales. El fascinante tourbillon aparece a las 6 horas.
El complejo calibre 3600 de movimiento mecánico combina más de 20 complicaciones, por lo que los principales retos de Vacheron Constantin fueron los de ahorrar energía y aumentar la reserva. Para ello, los barriletes se hicieron con una aleación Bioflex, dúctil y resistente. Este mecanismo de 514 piezas y solo 8.7 mm de grosor está resguardado por una caja de oro blanco de 45 mm de diámetro.
Les Cabinotiers Celestia Astronomical Grand Complication 3600 está condecorado con el prestigioso Punzón de Ginebra, que certifica su calidad.
