Este año, la colección Boy·Friend de Chanel celebra cinco años de existencia con nuevas ediciones. Las novedades de la maison incluyen una versión esqueletizada con diamantes, y diferentes iteraciones con el emblemático tejido de lana (tweed), ya sea en la correa o representado con esmalte Grand Feu en la esfera.
La colección mantiene su diseño minimalista y su caja, inspirada en la del modelo Première de 1987, se mantiene sin grandes modificaciones: es de forma octogonal, como las formas de la plaza Vendôme y el tapón del simbólico perfume Chanel No 5. En sus tres tamaños (pequeño, mediano y grande), los modelos pueden ser de oro blanco o beige (exclusivo de la firma), y acero inoxidable.
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El modelo Boy·Friend Squelette se presenta en una caja de oro blanco de 18 quilates con bisel engastado con diamantes corte baguette. Es hermético hasta 30 metros de profundidad e integra un movimiento mecánico de carga manual (Calibre 3). La correa es de piel negra con patrón de caimán y su hebilla también está adornada con diamantes.
En sus diferentes versiones, el modelo Boy·Friend Tweed integra un movimiento de cuarzo de precisión, mientras que su diseño puede incluir esferas sencillas, con engaste de piedras preciosas o con el patrón de tweed en esmalte Grand Feu. Asimismo, las opciones de correa van desde el mismo tejido de lana, de satín en distintos colores o de piel de becerro con patrón de caimán.