Fundada por Francois Moreau en 2015, Reservoir se sirve de la inspiración trazada por instrumentos de medición que han formado parte la historia en numerosos ámbitos: desde el automovilismo y la aviación hasta la exploración submarina. Con varias colecciones que evocan el estilo de antiguos contadores extraídos de cada uno de estos universos, la firma crece a pasos agigantados dentro de la industria gracias a su propuesta radical de la lectura del tiempo.
Para esta edición de Baselworld, Reservoir se sumergió en el espíritu de exploración submarina y presentó la colección Hydrosphere. Una familia de tres relojes que hacen referencia a los manómetros de presión utilizados en el buceo, pero con una composición en la esfera -de aguja retrógrada para los minutos y hora saltante- que revoluciona por completo la tradicional estética de los relojes de buzo.
Inmerso en una caja de acero 316L, de acabados pulidos y cepillados, y hermética hasta 250 metros de profundidad, el movimiento automático ETA 2825-2 integra un módulo patentado de 124 piezas que hace posible las funciones de minuto retrógrado, hora saltante, fecha e indicación de reserva de marcha (37 horas).
Dispuestos para las profundidades, los Hydrosphere Blackfin, Blue Hole y Air Gauge exhiben un bisel giratorio unidireccional de cerámica con doble graduación que permite leer el tiempo de las paradas de descompresión antes y después del retorno de la aguja retrógrada; también incorporan una válvula de helio, una lupa sobre la ventanilla de hora que optimiza su legibilidad y tratamiento de SuperLumiNova en todas sus indicaciones.
Esta colección se entrega en un estuche inspirado en las cajas herméticas propias del instrumental de la marina e incluye una correa de caucho adicional, además de la herramienta necesaria para desmontar el brazalete de acero 316L.