Audemars Piguet presenta una nueva pieza con la cual le da continuidad a su colección Code 11.59, se trata de una edición limitada a sólo 50 ejemplares que reúne complicación de cronógrafo flyback y tourbillon volante en su mecanismo, también destacado por su arquitectura vanguardista y llamativa.
El nuevo reloj de la colección Code 11.59.Anteriormente, en 1999, Audemars Piguet logró combinar con maestría el tourbillon y el cronógrafo en una edición limitada a 20 unidades, llamada Jules Audemars Tradition d’Excellence n°1 y que también maravilló al mundo de la relojería por incluir la función de repetidor de minutos. Incluso, en 1986, la Manufactura presentó el primer tourbillon automático de la historia de los relojes de pulsera, una creación extraplana con una caja de sólo 5,3 mm de grosor y un tourbillon con un diámetro de 7,2 mm y un peso de sólo 0,123 g.
Se ofrece con una correa aligátor azul, cosida a mano y con hebilla desplegable AP de oro blanco de 18 quilates.Ahora, la firma suiza vuelve a expresar su savoir faire con la introducción del Code 11.59 by Audemars Piguet Selfwinding Flying Tourbillon Chronograph, en caja de oro blanco de 18 quilates y con aspecto tridimensional, una creación con más de 100 ángulos pulidos a mano y superficies que alternan acabados satinados y arenados. Su mecanismo, visible por ambos lados, ofrece un juego de luz único gracias al contraste entre entre los puentes esqueleto rodiados y galvánicos negros hechos de titanio y plata niquelada.
Su movimiento es visible por ambos lados.Este movimiento, el Calibre de Manufactura 2952, es un movimiento automático que, como mencionamos, dispone de un tourbillon volante y ofrece función de cronógrafo flyback. Tiene una frecuencia de 3 Hz y una autonomía mínima de 65 horas. En el reverso de la caja se puede apreciar su masa oscilante con diseño esqueleto, desarrollada en oro rosa de 22 quilates rodiado, en sintonía con el color de los puentes.
Calibre de Manufactura 2952.La esfera de este nuevo Code 11.59, además de exhibir la complejidad técnica del calibre 2952, se compone de un realce lacado azul con escala minutera y un par de manecillas de oro blanco azulado para indicar las horas y los minutos. Cabe destacar que los anillos del cronógrafo, también en tonalidad azul, revelan parcialmente el mecanismo interno.