Tan práctica como sofisticada, la colección Master Control de Jaeger-LeCoultre se ha convertido en un clásico moderno a lo largo de sus tres décadas de existencia. Años en los que su evolución ha sido constante, siempre con miras a la innovación. Resultado de ello es la nueva iteración de este año, un modelo de cronógrafo con calendario presentado en caja de oro rosa y esfera negra: un contraste ideal con todas las prestaciones que el usuario moderno exige.
La fascinación en torno a esta colección se explica desde la elección de su nombre (en referencia a la prueba de las mil horas de Jaeger-LeCoultre) y el momento de su nacimiento. Y es que la colección Master Control fue la primera familia de relojes de la manufactura en someterse al riguroso protocolo de pruebas.
TAMBIÉN TE PUEDE INTERESAR: Lenny Kravitz es el nuevo embajador de Jaeger-LeCoultre
El nuevo master Control Chronograph Calendar, como todos los relojes de esta familia, se inspira en modelos emblemáticos de la maison de los años 50 y 60 (como el Memovox y Futurematic) y evoca sutilmente las esferas de colores de modelos de mediados del siglo XX.
En la nueva iteración la esfera es de color negro y está enmarcada por una escala pulsométrica (originalmente creada para que los médicos midieran la frecuencia cardíaca) destacada en color rojo. Este color se repite en detalles de las subesferas del cronógrafo y el display de calendario.
El conjunto está enmarcado por una caja de oro rosa de 40 milímetros de diámetro, con bisel inclinado hacia afuera y asas curvadas. El fondo es de cristal de zafiro y revela los detalles y decoraciones del movimiento que, en este modelo, es el calibre automático 759 con reserva de marcha de 65 horas. Este mecanismo también incorpora la indicación de fases lunares.
