Inspirada en el encanto de los bosques que rodean su manufactura, la firma japonesa Grand Seiko nos presenta una pieza de la colección Evolution 9 bautizada como Shirakaba.
Shirakaba es el nombre japonés de los abedules blancos que habitan los alrededores de Shizukuishi, muy cerca del hogar de la firma. Shira significa “blanco”, mientras que Kaba es el kanji combinado de las palabras “madera” y “belleza”. Estos tres conceptos se representan con maestría en la esfera del reloj, logrando transmitir la misma sensación que resulta de visitar y respirar los bosques de abedules.
Dicha representación, dinámica y elegante, sirve como telón de fondo para las características agujas y marcadores acanalados, asegurando una legibilidad óptima en cualquier condición. Lo anterior se enmarca por una caja de acero inoxidable de 40 milímetros de diámetro, engalanada con distintos acabados, entre ellos el pulido Zaratsu.
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Si bien el diseño se mantiene fiel al estilo Grand Seiko definido en 1967 con la referencia 44GS, el nuevo modelo Shirakaba logra fusionar esta herencia con detalles de estilo contemporáneo que representan y apuntan a la nueva era de la manufactura.
En su dimensión mecánica, el nuevo Evolution 9 Shirakaba está acoplado con un movimiento de alta frecuencia, el calibre 9SA5 de manufactura propia. Presentado por primera vez en 2o20, este movimiento, de carga automática y 80 horas de reserva de marcha, incorpora tres desarrollos significativos para la firma: el escape Dual Impulse, el volante de suspensión libre Grand Seiko, y el tren de engranajes horizontal que, combinados, logran una gran eficiencia energética.