En 1997, Frederique Constant introdujo su primer reloj de regata, el Yacht Timer Regatta Countdown, un sofisticado modelo que expresaba la pasión por la navegación del cofundador de la firma, Peter Stas. Ahora, más de dos décadas después, esta edición regresa con su función de cuenta regresiva, la cual se expresa mediante cinco aperturas circulares en la parte superior de la esfera.
La nueva versión del Yacht Timer Regatta Countdown se presenta con una caja de acero con acabado pulido. Su diámetro es de 42 mm e incorpora un cristal de zafiro convexo así como un fondo abierto para revelar el mecanismo. Ofrece una hermeticidad de hasta 100 metros.
La carátula destaca por su guilloché y tonalidad gris, que logra un contraste armónico con los índices plateados, aplicados y recubiertos de material luminiscente, al igual que las manecillas destinadas a indicar horas y minutos. La aguja segundera, por su parte, se presenta en tonalidad naranja.
A las doce horas se encuentran cinco aperturas para contabilizar los últimos diez minutos para iniciar la regata. Primero se contabilizan cinco minutos a través del cambio de color a blanco de cada uno de los puntos; después, los mismos puntos cambian a naranja para indicar que la regata oficialmente ha comenzado.
El Yacht Timer Regatta Countdown se alimenta del calibre FC-380, un movimiento automático con frecuencia de 28,800 alternancias por hora y una reserva de marcha de hasta 48 horas. Este mecanismo es visible por el fondo abierto de la caja, la cual integra un brazalete de acero o una correa de caucho adicional.
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